ESTA JOVEN CAMERA ES UNA DE LAS PARTICIPANTES DEL NUEVO PROGRAMA DE TELECINCO ‘LA VOZ’, QUE TRATA DE ENCONTRAR A LA PERSONA CON MEJORES CUALIDADES VOCALES DEL PAÍS. ANABELLA HA DEMOSTRADO QUE CON ESFUERZO Y PERSEVERANCIA SE PUEDE CONSEGUIR CUALQUIER DESEO. A LO LARGO DE LOS AÑOS, HA SENTIDO BULLIR EN SU INTERIOR UN FUERTE SENTIMIENTO POR SER CANTANTE Y PODER SUBIRSE A UN ESCENARIO. COMO ELLA MISMA INDICA, SU MAYOR “PLACER” ES TRANSMITIR “EMOCIONES A TRAVÉS DE LA MÚSICA”. PARTICIPAR EN ESTE PROGRAMA LE VA A DAR LA OPORTUNIDAD DE HACER LO QUE MÁS LE GUSTA. DESDE HACE TIEMPO, TRABAJA CON SU PADRE EN UNA EMPRESA DE ALUMINIO SITUADA EN EL BARRIO DE BALCÓN DE SEVILLA. SE CONSIDERA UNA PERSONA “SOCIABLE” E “IMPULSIVA”. SU ACTITUD POSITIVA ANTE LA VIDA, LE HA SERVIDO PARA AFRONTAR DESILUSIONES Y NO TIRAR NUNCA LA TOALLA, HASTA RECIBIR LA RECOMPENSA A TANTOS AÑOS DE ESFUERZO. ESE PENSAMIENTO LA MANTUVO FUERTE DURANTE LA PRUEBA FINAL, CUANDO HASTA LOS ÚLTIMOS SEGUNDOS NO FUE ELEGIDA PARA ENTRAR EN EL CONCURSO. AHORA ES EL MOMENTO DE “DARLO TODO” Y DE “APROVECHAR ESTA OPORTUNIDAD” QUE LE BRINDA EL DESTINO PARA DECIRLE AL MUNDO QUE HA NACIDO PARA LA MÚSICA.
J.M. Romero: ¿Qué tal el recibimiento de los cameros después de tu debut en el programa?
Anabella Arregui: He notado mucha ilusión, me satisface mucho y me siento muy orgullosa y realizada porque veo que estoy ilusionando a la gente de mi pueblo. Me da mucha alegría verlo. Además, ahora que estamos pasando momentos difíciles, no viene mal un poco de ilusión.
JMR: ¿Qué sentías mientras cantabas?
AA: Sentía mucha emoción, pero eran tantos sentimientos juntos que no era consciente de que estaba viviendo el momento que había esperado durante veintitrés años. Siempre he soñado con ser artista y poder tener una oportunidad así. Había soñado tantas veces esa oportunidad, que no me lo creía. Tenía que darlo todo.
JMR: Iba pasando la canción y los ‘coaches’ no le daban al pulsador, ¿qué se te pasó por la cabeza cuando viste a Rosario Flores darse la vuelta?
AA: Me dio mucha alegría que se diera la vuelta Rosario, porque me identifico mucho con ella. Durante mi actuación, quise transmitir sensaciones e intenté llegar al corazón de los miembros del jurado. Si te paras a pensar en las cuatro personas que están de espaldas, no te concentras en lo que en realidad les quieres transmitir. Me dejé llevar por cosas positivas. Cuando vi que Rosario se daba la vuelta…creía que me iba a desmayar. Fue una emoción muy fuerte. Hasta ese momento me decía que ya se acababa ese sueño, que se ponía fin a ese gran regalo. Por ello, me puse a mirar al público, los focos, las luces, las cámaras para recordarlo siempre porque creía que me venía. Pero escuché un sonido fuerte y la vi cómo se giraba. Cuando nos miramos a los ojos, fue un momento emocionante. Lo estoy contando y se me ponen los pelos de punta.
JMR: En el caso de que no hubiera pulsado nadie, ¿habrías pensado en dejar la música?
AA: Por supuesto que no. Cuando el destino te pone en el camino una oportunidad así es como una especie de señal para que te motives. El destino sin yo esperarlo me puso ese regalo en mi camino. Cada casting que pasaba era un motivo más para seguir adelante. Si no se hubiera vuelto nadie, me habría quedado con el regalo de haber llegado hasta la prueba final. Nunca hay que tirar la toalla.
JMR: ¿Cómo te enteraste de que habías llegado a las actuaciones a ciegas (prueba final)?
AA: Pues tuve que pasar varios castings, además de una prueba de quince minutos delante de los directores del programa y de un jurado de más de diez personas. Para esta prueba, que fue en febrero, tuve que ir a Madrid, mi padre me acompañó para que no fuera sola y llegué con fiebre después del frío que habíamos pasado en la estación. Recuerdo el camino de regreso a Sevilla, íbamos los dos en silencio y yo le decía que confiara en mí porque lo había hecho lo mejor que sé y seguro que pasábamos. Un mes después, estaba trabajando en la oficina, tenía un día de mucho agobio, cuando recibí una llamada en la que me dijeron que había pasado a la prueba final. Al escucharlo, me emocioné tanto, que cayeron lágrimas hasta en las facturas.
JMR: La televisión sólo muestra, por lo general, la parte bonita de la profesión, es decir, cuando el artista triunfa, pero hay momentos muy difíciles, ¿eso te marca de alguna manera?
AA: Eso te marca mucho y te ayuda a saber darle importancia a las cosas simples que uno tiene y que son precisamente aquellas que te hacen feliz. La persona triunfa cuando aprende a valorar las cosas que tiene cerca. Es verdad que a veces el destino te lo pone difícil, pero hay que ponerle buena cara. Gracias a dios, no tengo males alrededor, mi familia es genial y estoy rodeada de gente buena. Por ello, hay que ser positivo y tener en cuenta lo que tenemos cerca. En relación con la música, siento que aún no he conseguido nada, la vida es un continuo examen; siempre hay que hacer las cosas lo mejor posible para conseguir algo, no hay que conformarse. Ahora vivo un momento emocionante, pero tengo que seguir trabajando en ello, sin olvidar lo difícil que ha sido llegar hasta aquí.
JMR: ¿Por qué decidiste presentarte a ‘La Voz’? ¿Lo habías intentado antes en otros formatos televisivos?
AA: Sí, me presente, creo recordar, a la segunda edición de ‘Operación Triunfo’. Pasé varios castings, pero mentí sobre mi edad. Por aquellos entonces tenía quince años y dije que tenía veintitrés. Me hacía tanta ilusión, que fui capaz hasta de mentir. Cuando pidieron el dni y vieron que no tenía ni la edad mínima -dieciséis años-, se enfadaron bastante conmigo. Con ‘La Voz’ fue distinto porque el programa vino a mí. Una está rodando siempre por este mundo, me suelo presentar a todo y suelo ir a todos sitios. Al parecer, el equipo de producción del programa contaba con una base de datos y se puso en contacto conmigo por si me apetecía participar. Evidentemente dije que sí.
JMR: ¿Has tenido que sacrificar cosas en tu vida por cumplir tu sueño?
AA: Muchas, he sacrificado muchas horas de estudio, horas con mi familia, estar con amigos y amigas, muchos helados en verano. He dormido fuera de casa muchos días y en malas condiciones, sobre todo cuando tenía que ir a cantar a otras ciudades con la primera orquesta en la que estuve.
JMR: ¿Ves ahora recompensando tanto esfuerzo?
AA: En la vida no se puede tener todo, yo me decanté por ser artista y por poder cantar encima de un escenario. Desde ese momento, fui consciente de que otras muchas cosas no las voy a tener.
JMR: En el siguiente programa comienzan los duelos, ¿qué sensaciones tienes ante este reto? ¿Te ves con opciones de pasar? (Recordar que cada coach recorta su equipo de 14 a 7 cantantes).
AA: Pues afronto este reto sintiendo que no tengo que demostrar ni más ni menos de lo que soy, tengo solamente que centrarme en la importancia que tiene esto para mí y en no dejarme nada en el tintero. Ahora es el momento de darlo todo. A ver qué pasa…
JMR: ¿Te ves con opciones de pasar?
AA: En el programa hay mucho nivel, tanto personal como profesional. Me veo con opciones porque confío en mí.
JMR: Si te plantaras en una hipotética final, ¿quién crees que sería tu mayor rival?
AA: Como rival no veo a nadie, la verdad que parecemos todos amigos porque son muchas horas allí y compartimos momentos de todo tipo ya sean alegres o tristes. Cada uno tiene su punto fuerte, pero lo más importante es confiar en uno mismo. Es mejor no fijarse en los demás, porque como te pongas a mirar las cualidades que tienen ellos y que tú no tienes, te creas prejuicios y miedos, y el miedo no te permite expresarte bien. Así que para mí es fundamental centrarme sólo en lo que sé hacer.
JMR: ¿Crees que puedes ganar?
AA: Después de tantos años de esfuerzo, querer mejorar y hacer todo lo posible por tener una oportunidad en la música, que me llamen de un programa para que me presente…yo creo que ya he ganado. A pesar de esto, evidentemente, voy a intentar ganarlo.
JMR: ¿Eres consciente de que Camas está contigo? ¿Qué sientes cuando ves que la gente de tu pueblo te apoya tanto?
AA: La verdad que no me lo creo. Cuando bajo a la calle y algún vecino me dice que se alegra, me da mucha alegría, no sé ni cómo agradecerlo. Me siento tan feliz. Yo nunca imaginaba que iba a pasear por Camas y la gente de mi pueblo me iba a dar la enhorabuena por mi actuación. Es algo muy bonito. Me gusta compartirlo con la gente de mi pueblo y me alegra mucho ver como también se ilusiona, teniendo en cuenta la situación tan difícil que estamos viviendo.
JMR: Una vez que termine el programa, ¿cuál crees que será tu siguiente paso en la música?
AA: Seguiré trabajando, luchando, aprendiendo y valorando las cosas que me vayan apareciendo en el camino. La vida es un continuo reto, siempre hay que estar en tensión y no te puedes conformar. Hay que ser humilde y seguir aprendiendo.
JMR: ¿Después de este capítulo de tu vida, en el siguiente se podría conseguir sacar un disco?
AA: Por supuesto, pero no es grabar un disco por el hecho material de que la gente vea la portada o ponerle mi cara, sino porque aparte de cantar, también compongo canciones y mi mayor placer es transmitirle a la gente, es decir, crear emociones e ilusiones. Grabar un disco sería una gran oportunidad para enseñarle al mundo mi manera de sentir las cosas.