La destreza y la observación en los detalles dan lugar a la creación de prendas de una  calidad propia de conocidos diseñadores

J.M. Romero

El taller de corte y confección de Camas lleva casi veinte años transmitiendo unos conocimientos fundamentales para conocer en profundidad los entresijos adheridos a la capacidad de crear todo tipo de prendas de vestir a partir de simples tejidos. Mercedes Cid se ha convertido a lo largo de todos estos años en la voz experta del mundo de la costura en el municipio camero. Actualmente, el número de alumnos asciende a 45, divididos en tres grupos que trabajan en horario de tarde de lunes a jueves. La paciencia y el buen gusto por la moda son dos premisas notablemente influyentes a la hora de intentar convertir cualquier diseño en una prenda de vestir.

A la hora de leer cualquier revista, ver un acto televisivo o simplemente el hecho de acudir a una boda, las personas suelen asimilar algunos rasgos superficiales de la ropa que llevan los asistentes, sin embargo, aquellos que poseen una mirada entrenada en el mundo del diseño, el corte y la confección analizan en profundidad todos los detalles. La principal capacidad que la profesora Cid valora de sus alumnos, es la observación. “Me llena de orgullo que los alumnos aprendan a descubrir los miles de detalles que tiene la costura”, manifiesta.

La formación es esencial para conseguir una base solida que sirva como rampa de despegue a la hora de afrontar objetivos más ambiciosos. Por ello, los primeros días son básicamente teóricos y se sustentan en el aprendizaje básico de los patrones. Al cabo de dos o tres meses el control en la creación de patrones es el indicado, por lo que se pasa a cortar y, finalmente, a coser. Según Cid, es “fácil” aprender, sólo te tiene que “gustar” y tener mucha “paciencia”.

En el taller de costura de Camas se hacen todo tipo de prendas, desde trajes de chaqueta, ropas de bebé, vestidos de comunión, hasta túnicas de nazareno, vestidos de flamenca o, incluso, sotanas. A veces, el alumno lleva revistas o fotografías donde ha visto un diseño que le parece interesante, y, en otras ocasiones, también sucede que tenga una idea preconcebida y busque un modelo que le sirva como punto de partida. De todas formas, el objetivo es diseñar prendas útiles y originales a su gusto, pasar un rato divertido y sentirse orgulloso del trabajo realizado.

Dos décadas dan para mucho, la experiencia se adquiere con el paso del tiempo pero la creatividad es algo con lo que se nace. Así pues, en el taller de corte y confección de Camas se combinan todas estas aristas en un fin común que no es otro que el verdadero aprendizaje del mundo de la costura.

VIDEO

.